En el Mediterráneo oriental surgieron con fuerza las ciudades griegas. En sus luchas contra los persas, los griegos desarrollaron un nuevo tipo de formación: la falange. Los griegos se armaban con una larga pica, casco, coraza y un gran escudo llamado hoplón. Así, a los soldados que componían la falange se les denominó hoplitas. La falange fue el instrumento de expansión del imperio macedónico, que abarcaba desde el Mediterráneo central hasta la India. Este imperio alcanzó su apogeo con Alejandro Magno. Griegos y persas también desarrollaron grandes armas para el asedio de ciudades, como arietes, catapultas y torres de asalto.